La llame Dolores de una buena causa infectada de mentiras.
Dolores izquierdos en el suelo gris que me sienten loco aunque ofensivamente peligroso en el segundo asalto.
Gol de primavera ausente de su verdadera falta cerebral de tanto domingo.
Volveremos a vernos en las salas de la dudosa justicia en favor del final de tu caída carrera que hace tiempo que no es.
Agárrate bien a la sombra de los partidos corazones que nunca supiste entender.
Fraude violento en contra de las musas de tu invernal manera de querer.
A saber saber tu olor de cara fragancia y polvos de talco de algún engaño.
Al encuentro de esa noticia que se hará aspirante y degradante sobre tu maniquí de cera.
A callar, a la sombra tu larga falta de un chulesco infarto acerebral.
Causado por algún débito maternal que insistes en conquistar.
Te pudras o no, vivo insisto en ver quien pierde primero.
Por tu ruina.
Nada de aspirina.
ﹰA ése 10 más cocaina.
Tal vez la música que nunca supiste entender te acompañe hasta algún atardecer descompuesto.
Retraso de la pelota injusta que nada asusta en ésta nausea que produces.
Patada a contra golpe de firmadas firmas vendidas.
Locos somos unos cuantos que a falta de un segundo asalto nos encierran en vida.
Frío ausente de calidad embarazosa de tu absurda losa caprichosa.
Mutante zurdo y tardes de futbol.
Contra ataque en la frente de prensa sirviente y audaz.
Caída del 10 al 0 infinito.
Atentamente, tu loco pero sabroso cabron maldito.
Saluda a la afición.
¿Que te parece la canción?
Es don don don es don dinero.
Saque de banda.
